Mis queridos amigos, los amamos mucho,
Respira y disfruta de la sensación del abundante aire que ingresa a tus pulmones. Relájate y suéltalo. Tome otro respiro y, mientras lo hace, sienta la plenitud y riqueza del oxígeno mezclándose y mezclándose con su cuerpo. Sienta la alegría del cuerpo mientras toma el aire y comienza a compartir esta nutrición a través de su torrente sanguíneo, entregando el oxígeno para alimentar cada célula preciosa. Relajarse. Lanzamiento. Permita que todo lo que no sirve simplemente fluya lejos de usted.
¡En cada respiración, queridos, ustedes toman la riqueza, la abundancia, la energía y el combustible del universo! Respira de nuevo. Siente esta riqueza de aire y energía llenando tu cuerpo. Imagínelo siendo absorbido, distribuido a través de miles de millas de vasos sanguíneos y capilares. Imagina que tus células lo reciben con gratitud. Imagínelo avivando las llamas de cada celda de la misma manera que el aire aviva las llamas de un incendio. ¡Siente la gratitud de cada célula!
¡Lo único que hiciste fue respirar, pero en ese mismo aliento, atrajiste la fuerza y la riqueza de la vida a billones de pequeños seres dentro de ti! ¿Puedes imaginar? Esta es tu salud! Esta es tu riqueza! Esta es su conexión con la abundancia de todas y cada una de las frecuencias en todo el cosmos conocido y desconocido. Respirar….
Queridos, nunca están separados de lo que buscan. Nunca tienes que buscar para empezar. Respiras las frecuencias que quieres ver manifestadas en tu vida. ¡Permites que se mezclen con el oxígeno físico y se entreguen vibratoriamente a cada célula, cargando cada pequeño vórtice de energía giratoria que forma lo que parece un cuerpo! En verdad, ustedes son patrones de luz y energía: ¡seres vibrantes que pulsan al ritmo del cosmos!
Respira ... ¡estás girando los vórtices que llamas las partículas que forman lo que llamas tus células! ¡Lanzamiento! ¡Estás limpiando viejas frecuencias de los vórtices que llamas las partículas que forman lo que llamas tus células!
¿Puedes imaginar? ¡Eres carne y sangre pero más allá de esa ilusión, eres energía y en el aliento que tomas en la riqueza, abundancia y riqueza de la bondad y gracia de Dios! Respira ... Relájate ... Estás en un estado de gracia ahora, un estado de flujo.
Queridos, es realmente así de simple. Decide qué quieres experimentar. Imaginalo. Respira. Respira las frecuencias de la salud. Respira las frecuencias del amor. Usando tu simple intención, respira las frecuencias de amor incondicional, bienestar, alegría, gracia, tranquilidad. Sentirlo. Recuerdalo. Conéctese a menudo con lo que busca experimentar a través de una simple intención y respiración.
Si no hicieras nada más para cambiar tu vida, el mismo acto de respirar conscientemente y con intención comenzaría a cambiar tu vida de forma suave, poderosa y amable.
¡Dios te bendiga! Te queremos un montón.
- Los Angeles
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